RENACER - EL CAMBIO

A mi alrededor solo fumarolas, posas de agua caliente, al frente la montaña con algunas cuevas.

-¿Qué tendré que hacer? ¿Meterme al agua para desprender el resto de las capas?

Tan absorta estaba en el agua que no percibí una presencia, solo escuche una voz que decía "Violeta ¿va a venir o no?"

Frente a la cueva había un hombre, se veía joven pero  no podía ver bien su cara, solo escuchaba su voz, una voz desconocida, que me atraía, mi corazón hacía sentir su latido. Cuando llegue a su lado dice “es hora de desprenderé de todas esas capas que llevas adheridas”. Sentí su mirada pero mis ojos lo rehuyeron buscando el final de la cueva que parecía no tener salida, solo veía el vapor que  desprendía un pequeño hilo de agua termal.

-        Mmmm son muchas pero has ido trabajando, están bastante sueltas, empecemos.

Me vuelvo hacia él,  ya no está, se ha adelantado “¡¡¡vamos!!!!”, ahora su voz es autoritaria, me siento algo contrariada pero lo sigo.

Por ir absorta en mis pensamientos, tropiezo y caigo de espalda dándome un fuerte golpe, este extraño compañero pasa su mano por mi espalda, me siento confortada, el dolor pasa, "una capa menos"  dice mientras una de sus manos acaricia mi mejilla, apenas un pequeño roce, antes de poder reaccionar ya está en pie y sigue su camino.

Así continuamos muchos días, muchos no sé cuantos, él no hablaba mucho, solo después de mucho preguntar me fui enterando de el difícil camino que ha recorrido, pienso que él también tiene muchas capas y unas muy duras. No entiendo como ayuda a mí y no hace nada con las de él. Cuando voy a preguntar me dice que es hora de seguir.

Caí unas cuantas veces más, siempre recibiendo un trato amable, afectuoso. Un día mientras comíamos logre ver sus ojos, unos hermosos ojos verdes que hablan de compasión y amor. Al ver que lo miraba, muy serio dijo "es hora que continue sola, mi tarea acabo", en mi garganta un nudo que no dejaba salir mis palabras, mis ojos le llenaron de lágrimas, él continuo firme en su decisión, sólo frente a mis suplicas accedió a continuar una parte del camino, pero ya su paso era más rápido.

En un recodo del camino veo una arpía, él me aparta y me dice que llego el momento de seguir caminos separados, que debe llevarla a su casa para que no dañe a nadie. Me mira a los ojos y  dice “no sabes lo que gustaría seguir el camino contigo Viole, pero mi destino está fijado” El destino no existe le digo, pero ya no me escucha.

Sola en medio de  este camino, a tropezones, cuando caigo ya nadie me recoge, el camino se hace más amplio y se aprendí a curar las heridas, pero son tantas que ya ni lo intento, algo me alegra, es que van apareciendo otros seres mágicos, hadas, duendes y otros, supe que algunos tuvieron guías, otros iban solos. Pero pasamos grandes ratos juntos, pero el camino es solitario.

En un recodo hay una entrada que parece llamarme y la arpía se lanza encima dejándome múltiples arañazos, quiere morderme, doy varios golpes, cuando aparece él y la llama, parece que se va a ir sobre mi otra vez, trato de captar la mirada de mi antiguo compañero de camino, pero no me mira, es como si no me conociera, duele más si su indiferencia que los arañazos.

Triste, dolida, pero con varias capas menos sigo mi camino, preguntándome muchas cosas, tan concentrada voy escalando por una parte donde no parece haber camino, mi escoba no quiso venir y no la culpo, que solo siento jalan mi cabello, caigo fuerte sobre algo que parece blando pero huele horrible, mezcla de humedad, eso olor a podredumbre que tienen las carroñeras me asquea  y empezamos a rodar por el suelo, esta vez lo único que alcanzo a hacer es  tratar de protegerme, no me da tiempo de mas y mis fuerzas están muy mermadas, escucho la voz de él que la llama, pero esta vez no obedece, parece que esta vez lograra morderme, cuando se queda quieta un momento y se va aparentemente tranquila, muy extrañada, me vuelvo, y muy cerca veo a mi mago,  le habla suave en una lengua que no conozco, la arpía  me mira una vez más con sus ojos llenos de odio y va hacia mi antiguo mentor.

No puedo ponerme en pie y esta vez no contengo la lágrimas, que ruedan por el suelo, el llanto sacude mi cuerpo, me parece sentir unos fuertes brazos que me rodean y levantan, a mi oído la voz de mi mago, “tranquila hechi”, mi cabeza se esconde en su cuello mientras continua mi llanto.

Así me cargo varios días, me alimentaba, y me cargaba, poco a poco mi llanto fue cesando, dejando mi cuerpo flojo,  ahí mi pobre mago me cargo a la espalda, “así avanzaremos más rápido” dice “es hora de salir de acá”. Me di cuenta del esfuerzo realizado por mi gran amigo, y pude ver a lo lejos una  luz que anunciaba el final del camino, pero se veía muy lejos, muy lejos.

 Unos días mas ya podía caminar, alguna que otra herida aun sangraba, quedaron varias cicatrices, unas superficiales que se borrarían, otras nunca. Así  afirmada en el brazo de mi mago salimos de esa cueva, antes de salir quiero mirar atras por última vez ese camino, pero no no lo hago.

Seguí caminando lado a lado de este ser maravilloso,  que tiene sus propias luchas y su propio camino, pero que espero siempre sea paralelo al mío.

Todo se nubla, estoy de nuevo en mi habitación, respiro fuerte, fue tan vivido el recuerdo, miro el caldero ya por apagarse pensando en cuantas capas me saque, las que ahora están en mi mochila para usarlas solo un rato si las necesito.

Me acerco a la ventana a tomar aire fresco, observar la luna y reflexionar sobre lo vivido, en la cara de la luna unos ojos verdes parecen mirarme, alcanso a ver una tímida sonrisa, la correspondo con otra sonrisa, “gracias” alcanzo a susurrar antes que la imagen se desvanezca.

Mi guía, en mi corazón siempre habrá un lugar de afecto especial para quien me saco la capa que nublaba mi visión, quien saco tantas capas, ojala pueda salir de esa oscura cueva, correr por la verde pradera, mojar sus pies con la fresca agua del mar, ojala sea feliz.

CREO EN TI

Intérprete: Miguel Bose

Creo en ti
Sin cegarme ni ponerte exclamación
Como en el buen humor creo en ti
Como creo que la unión hace la fuerza
Creo y soy para el mar y del mar
Creo en ti
*Creo en ti

Y tu ausencia pasa a ser mi eternidad
Tu silencio mi paz
Tu recuerdo mi motor
Y a pesar de todo creo en ti
Creo en ti
(Repite *)
Como el águila en sus alas al volar
Como en la libertad creo y sé
Que mi mundo cabe todo en un bolsillo
Ámalo y por siempre hazme que
Crea en ti
**Creo en ti
Como el sol que cree en cada amanecer
Como en mi evolución
Como el miedo en el valor
Creo en ti, mi estrella, creo en ti
(* Repite)
(** Repite)