En un triste
susurro el viento me trae la noticia de la partida de Gabriela, mi querida
compañera en este empinado y solitario camino, solo coincidimos un par de veces
las suficientes para convertirme en su admiradora por su sonrisa valiente, su entereza,
su integridad. Pasaste a otra dimensión, llevaras otros caminos, te extrañare
Gabriela Giovanola.
Quedo melancólica
pensando que aunque no soy quien para saber los designios del creador me parece
que Gabriela tenía mucho más que aportar que yo, quien sigue dando una lucha ciega
y a veces quejumbrosa.
¡reina! Escucho
un llamado. ¡un holograma! Mi querido mago, siempre presente, siempre oportuno,
que con solo su llamado me hace sonreír aun en los momentos más oscuros y melancólicos.
Gracias
amigo del alma por estar siempre presente, por tus mensajes y a veces por un
simple buenos días que ha ayudado a alegrar mi día.
Con el alma
tibia con esos rayos de sol primaverales que es el afecto de mi mago, de mis
queridas hadas, de mis amigas guerreras y los duendecillos, me siento renovada,
muchos son los que olvidaron a esta hechicera en reposo pero los que aún me
regalan sus palabras valen por miles.
CAMINANTE
Joan Manuel
Serrat
Todo
pasa y todo queda
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre la mar.
Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse de sol y grana,
volar bajo el cielo azul,
temblar súbitamente y quebrarse...
Nunca perseguí la gloria.
Caminante son tus huellas el camino y nada más;
caminante, no hay camino se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino sino estelas en la mar...
Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los bosques se visten de espinos
se oyó la voz de un poeta gritar
Caminante no hay camino, se hace camino al andar...
Golpe a golpe, verso a verso...
Murió el poeta lejos del hogar
le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse, le vieron llorar.
"Caminante, no hay camino, se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Cuando el jilguero no puede cantar
cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar.
Golpe a golpe, verso a verso. (3 bises)
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre la mar.
Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse de sol y grana,
volar bajo el cielo azul,
temblar súbitamente y quebrarse...
Nunca perseguí la gloria.
Caminante son tus huellas el camino y nada más;
caminante, no hay camino se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino sino estelas en la mar...
Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los bosques se visten de espinos
se oyó la voz de un poeta gritar
Caminante no hay camino, se hace camino al andar...
Golpe a golpe, verso a verso...
Murió el poeta lejos del hogar
le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse, le vieron llorar.
"Caminante, no hay camino, se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Cuando el jilguero no puede cantar
cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar.
Golpe a golpe, verso a verso. (3 bises)
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